¿Por qué se han creado tan rápido las vacunas del coronavirus?
Las vacunas del coronavirus se han desarrollado rápido. ¿Quieres saber las razones del proceso? Analiza los datos que te ofrecemos.
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Mucha es la desconfianza que genera la rapidez con la que se han creado las vacunas del coronavirus. La gente que no pertenece al ámbito científico, cree que por esta rapidez, la vacuna no está lo suficientemente probada. El desarrollo de una vacuna suele llevar más de 10 años. Entonces, ¿por qué las vacunas del coronavirus estuvieron listas en un año?
Urgencia mundial
Indudablemente, la urgencia de encontrar una solución a esta enfermedad que asola al mundo, ha sido el principal motor que movió a los científicos. Los laboratorios de diferentes partes del mundo se pusieron en marcha.
Sin embargo, detrás de la razón de orden sanitario, probablemente existió también otra que tiene que ver con la economía. Nunca fue un secreto el hecho de que, quien tuviera la fórmula de la vacuna, tendría beneficios asegurados.
Sea por lo que sea, las vacunas del coronavirus ya están en los centros de vacunación y en ellas está la esperanza de la humanidad. Pero siempre es bueno intentar un análisis de las condiciones que hicieron posible esta rapidez en la creación de las vacunas.
Los pasos en el desarrollo de vacunas
La creación de una vacuna se inicia con una fase de descubrimiento que supone el diseño, y a ella siguen los experimentos exploratorios. Estos experimentos se realizan en forma secuencial, evaluando el desarrollo, la validez y la toxicidad de la vacuna. Se habla de tres fases, fase I, fase II y fase III, en estos ensayos. En cada una de ellas se amplía el universo de los experimentos y se van corrigiendo defectos.
Es así, que cuando llega la fase III, se presenta la solicitud de licencia, que es revisada, y finalmente se autoriza. Entonces comienza la producción a gran escala.
Una aceleración de los pasos
La urgencia de la pandemia, determinó que los pasos se aceleraran, sin perder las certezas y la rigurosidad. El proceso de ensayos clínicos fue más rápido y las aprobaciones necesarias se hicieron también en menor tiempo. Esto fue posible por varios motivos.
En primer lugar, el desarrollo científico y los conocimientos previos permitieron eliminar la fase de descubrimiento. Las validaciones para las investigaciones fueron inmediatas y los ensayos de las vacunas comenzaron enseguida.
El apoyo y el compromiso de la población fue otro factor que contribuyó a la rapidez del surgimiento de las vacunas del coronavirus. El reclutamiento de voluntarios fue sumamente exitoso, mucha gente estuvo dispuesta a participar.
La aprobación de las vacunas y su legitimación por los organismos reguladores se realizó con el método extraordinario dada la situación. Los datos que se generaban en los laboratorios iban siendo revidados mientras los estudios aún estaban en marcha. De esta manera, cuando llegaron los resultados finales, poco quedaba por revisar, todo estaba bajo control.
En la actualidad, las vacunas están aprobadas y garantizada su eficiencia. Las investigaciones continúan, y el tiempo mostrará su impacto en el mundo. Pero hasta el momento, las vacunas del coronavirus están salvando vidas.
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